Como años atrás las victimas representadas con sus nombres sufrieron una afrenta. Esta mañana encontramos que todos los casos colectivos representados en piedras grandes habían sido derribados. Allí se representa a casos emblemáticos y comunidades campesinas arrasadas tanto por Sendero Luminoso como y miembros de las Fuerzas Armadas. Lucanamarca, Soros, Putis, Accomarca, Pucayacu, Checcasa, Pachas, Cabitos 84 son algunos de ellos.
Si, los nombres de todas esas víctimas están juntos, porque nos duele su ausencia.
También los de víctimas individuales cuyos nombres no queremos identificar para no generar dolor a sus familiares. Allí están los nombres de policías, universitarios, líderes sindicales, escolares, maestros, miembros de las fuerzas armadas, ecologistas, artistas, activistas de DDHH, empresarios, autoridades ediles, religiosos y religiosas.
Este atentado no nos daña a quienes promovemos su recuerdo, es una afrenta a la memoria, sacrificio, coraje, sueños y esperanzas de todas las víctimas de esta época de horror que vivió nuestro país.
